Hoy tuve que acompañar a mi hija al médico al Cunqueiro. La atención médica fantástica como lo era en el Xeral, las instalaciones han mejorado espectacularmente respecto al viejo Xeral; el aparcamiento se abarató respecto de la única vez que había acudido allí (lo cual me alegró el bolsillo). Sigue habiendo insolidaridad por parte de quienes aparcan en medio de un carril de circulación, dificultando ésta, e impidiendo en cierto modo el correcto discurrir del tráfico en un lugar en el que debe ser ágil.

Ahora bien, en algo ha empeorado y mucho respecto del Xeral. Ingenuo de mí salí de la consulta para pedir nueva cita dentro de 3 meses y realizar una ecografía (el doctor con gran sentido común me indicó que quizá sería bueno que los especialistas al menos dispusieran en sus consultas de estos aparatos y que recibieran una formación para su utilización; creo que esta medida redundaría en una mejora del servicio y una agilización del Hospital), me acerqué al mostrador correspondiente todo mejor organizado con un número y sitio para sentarse no una larga cola como en el Xeral, pero cuando toca mi turno cual fue mi sorpresa que al llevar la cita para una ecografía tuve que desplazarme unos 800 metros hasta encontrar el ascensor hasta la planta 3ª del hospital, al mostrador de radiología para allí pedir cita para dicha prueba, para posteriormente recorrer nuevamente otros 800 metros (lo cual no me importa, estoy acostumbrado a andar) y volver a la planta -1 y nuevamente en el mostrador de citas hacer la gestión. Entre a las 12:40, teníamos la cita a las 12:52, entramos en consulta a las 13:30 y pude salir a las 14:20. Comentaba con mi hija que lo debió diseñar un cardiólogo por aquello de quien mueve las piernas, mueve el corazón. En mi caso anduve sin problemas por el laberíntico recinto, pero ¿qué haría una persona mayor? ¿y un lesionado?

No lo comento de broma, porque en la época más informatizada de la historia, en el momento en que en un teléfono móvil o una tableta llevamos casi escrita nuestra vida, debe ser relativamente sencillo un programa informático ad hoc para gestionar las citas de los diversos servicios. Más fácil sería incluso que los médicos o sus enfermeras pudieran agendar, pero mucho más eficiente que de una única vez, en un único servicio puedas pedir vez para el servicio que sea. Se trata solo de informática, ¿o no? Mejoremos para avanzar, avancemos para ser referencia, seamos referencia para competir y mejorar un servicio público. La burocracia ralentiza, apliquemos la medicina de la modernidad que nos proporciona vivir en el siglo XXI.