Este fin de semana mi Partido celebra en Madrid una Conferencia, Convención, Fotografía política. ¿Qué va a solucionar? ¿Es la fórmula? ¿Quiénes van a acudir? Se ha concluido que el PP cae mal, pero ¿cae mal la organización en sí o las personas que la dirigen? ¿Caen por si mal unas siglas, un logo, un lema, un mensaje? Responder a esas cuestiones es importante porque es el núcleo gordiano de determinar la fórmula para salir de la grave crisis en que nos encontramos inmersos.
La verdad, da la impresión de que no se han sacado conclusiones, como he dicho en otras ocasiones, que no se ha hecho demasiado examen de conciencia, desde luego poco dolor de los pecados, decir los pecados al confesor (en este caso a la sociedad) aquí se ha centrado en caer mal y los problemas de comunicación, y cumplir la penitencia que te sea impuesta que en este caso afecta más al ciudadano que a la propia organización.
Una Conferencia convertida en la purga del tío Benito o el mismísimo bálsamo de Fierabrás, cuando parece que puede ser un poco de agua con la que lavar la cara y algo de colonia para que todo parezca distinto. Vamos lo que viene siendo un pase por la peluquería lavar y marcar que todos hemos oído a nuestras madres o abuelas. Los verdaderos cambios en el partido, imprescindibles, obligatoriamente vendrán de la mano de un Congreso Nacional en el que se podrán cambiar los Estatutos y por ende la forma de funcionamiento del Partido, tal y como por otro lado reconocen algunos líderes nacionales. De ahí la importancia que en la vida de un partido tiene un Congreso, es el verdadero impulsor interno y externo de la acción política deben de venir, en este caso creo que de: la renovación de la marca, no solo del logo, de la generosidad de algunos dirigentes que debieran dar un paso a un lado quedando como acervo del partido, pero dejando el relevo a otros nuevos dirigentes. Todo ello no se soluciona en una Conferencia Política, sí no en un Congreso de Refundación del Proyecto Popular como sucedió allá por 1989 en Sevilla. Solo recuperando la ILUSION se puede recuperar la confianza; solo haciendo CAMBIOS REALES se podrá recuperar; solo PROFUNDIZANDO EN LA DEMOCRACIA (en la interna también) reconectaremos con la sociedad y con los propios militantes; y solo CAMBIANDO LA ACTITUD, RENUNCIANDO A LA SOBERBIA se reconectará.
Pero con un ejemplo queda claro lo que pienso al respecto: ¿os imagináis que el grupo de médicos que han agravado el estado de salud de un paciente, tras errores en una operación, sean los mismos que intenten tratarlo? Por lo general ese equipo médico informará de lo sucedido y otro nuevo equipo se encargará de tratar al paciente, para ofrecer otra visión, pero sobre todo para devolverle la confianza al propio doliente y a su familia, ¿no?
Este fin de semana que se celebra la famosa Convención en la que se hablan de nuevas formas, no se respeta ni la más mínima democracia interna, se percibe que se trata de un mero acto propagandístico. Sinceramente no entiendo que los afiliados no hayamos sido invitados a participar en la Convención, que sean exclusivamente los dirigentes actuales (altos, medios y bajos) los que acudan a la misma, al menos en Vigo donde los afiliados no hemos sido invitados a participar. No sé si ha sido exclusivamente en la ciudad de Vigo (lo que intentaré averiguar) pero visto en internet los que formulan las preguntas son diputados, alcaldes, ministros, y demás familia como suelo decir CON CROMOS es decir en los cargos, que pasan de cargo a cargo intercambiando cromos y tiro porque me toca.
Para acabar solo quiero decir que los problemas del Partido Popular no se arreglan ajustando las letras P y el albatros en un círculo podemita, ni siquiera paseando en IFEMA a nuestros cargos como si del brazo incorrupto de Santa Teresa se tratase, y si con cercanía contrapuesta a lejanía; humildad vs soberbia y soberbios; y si se dice que se podrán hacer todas las preguntas que sean respetarlo y no cortar porque la democracia exige participación y escuchar.